jueves, 7 de marzo de 2013

Telémaco






Telémaco


Creciste demasiado deprisa
para darte cuenta
de las hazañas
de tu estirpe.
Demasiado rápido
como para disfrutar del bache
que para ti hemos construido.
Y ahora que te enfrentas a mi mendicidad,
ahora que ves la erosión de estas manos,
la indigencia de mi careto
y la poca fortuna con que mi logos
supo aferrarse a la vida
sabrás que mi lucha ya no tiene toalla.
Por ello, cuando tengas pensado ayudarme
a vencer a nuestros enemigos,
vete pensando en huir a Alemania
o a alguna otra parte
con un buen conocimiento del idioma
y con pocas ganas de gastar los esfuerzos
en una sociedad que se abate
 y agita, torpemente, las alas
contra este suelo patrio
que ahora aplastamos.